Si por algún motivo necesitas instalar tubería subterránea y te estás preparando para ser espectador de cómo distintas máquinas pesadas abren el terreno destruyendo todo lo que está inmediatamente en la superficie, te tenemos buenas noticias.
Lo primero que hay que tener claro al iniciar un proyecto de hincado de tubería sin zanjas es que, precisamente, no habrán máquinas destruyendo la superficie y todo lo valioso que en ella pueda estar construido.
Cómo funciona
A diferencia de la forma tradicional para enterrar tuberías, el hincado abre solo dos puntos en el trayecto donde irá la tubería: uno al inicio para insertar la tubería y otro al final para recibir la tubería.
Dependiendo de la obra, la tubería se puede ir armando por tramos si la extensión es grande. Por el contrario, si la extensión de la obra es corta, la tubería puede incluso armarse completamente antes de ser hincada. Los especialistas sabrán optar por una u otra alternativa, basándose en las características de la obra, los conocimientos técnicos y las experiencias previas.
El material de las tuberías
Dependiendo de lo que las tuberías subterráneas lleven en su interior, de las condiciones a las que se verán expuestas y del tipo de suelo, además del presupuesto manejado, es que se escoge el material en el cual deben estar fabricadas.
Hoy en día llevan la delantera las tuberías de policloruro de vinilo clorado (CPVC), sobre todo para transportar agua, ya que cuentan con la alta resistencia a la corrosión del PVC y, además, una alta resistencia a las presiones y temperaturas elevadas. Otros materiales son el PVC, el cobre y el acero galvanizado o inoxidable.
Las soluciones de Renta Machine
Finalmente hay que tener en consideración que para hincar tubería sin la abertura de zanjas es imprescindible contar con maquinaria tecnológica específica.
En Renta Machine son tres las máquinas que, siempre bajo el control de los especialistas, realizan esta tarea. La número uno es la Grundomat 130p diseñada como sistema de desplazamiento de suelo que sirve para atraviesos de hasta 110 mm de diámetro en PVC o HDP.
La número dos es la Grundoram Goliath que golpea 180 veces por minuto para hincar tuberías de hasta 1.400 mm de diámetro.
Y la número tres es la Grundoram Gigant para trabajos de hincado de tuberías de hasta 600 mm de diámetro, todo gracias a su martillo que golpea, cual boxeador inspirado, hasta 310 veces por minuto.