Los tubos utilizados en los métodos de hincado son tubos de material de concreto reforzado prefabricado, utilizados en instalaciones profundas donde no es posible realizar excavaciones abiertas convencionales. El método de hincado de tubería fue utilizado por primera vez entre los años 1896 y 1900 en Estados Unidos.
Esta técnica en la actualidad es utilizada para la construcción de redes de alcantarillado donde se emplean ejes intermedios como estaciones de hincado a lo largo de la línea de la alcantarilla llamados lumbreras.
En el procedimiento del hincado el tubo de concreto es equipado con un escudo en el borde delantero del primer tubo, esto con el fin de proteger el tubo, esto por lo general se implementa en la minería manual.
El tubo a la vez también es revestido en la parte exterior con lubricante, llamado Bentonita, este lubricante reduce la resistencia de fricción entre el tubo y el suelo. Este lubricante es bombeado a través de accesorios especiales que se instalan en la pared del tubo.
Cuando el procedimiento contempla la instalación de tubos grandes es aconsejable con rieles de guía en el fondo del tubo, esto es importante para dar dirección al método de hincado, dichos rieles son colocados en una losa de concreto.
La cantidad de los hincados al igual que su capacidad dependen principalmente del tamaño y longitud de los tubos que sean empujados y el tipo de suelo presente. Las paredes del túnel deben ser suficientemente resistentes y amplias para distribuir la capacidad máxima de los hincados contra el suelo detrás de la pared del túnel.
Características de los tubos
Con respecto a los materiales con los cuales son fabricados se debe especificar en las normas apropiadas requeridas para el cemento, los agregados, el acero reforzado y los aditivos.
La fabricación de los tubos para hincado deben cumplir con las normas requeridas cumpliendo con especial atención las dimensiones nominales, las longitudes del tubo y la resistencia compresiva del concreto, la cual no debe ser menor a 40 Mpa.
Por su parte las uniones de los tubos deben ser lo más simétricas posible, el grueso de la espiga debe ser lo más cercano al grosor del extremo de la campana.
Las características principales de las tuberías de hinca que las distinguen de la tubería en zanja normal son las siguientes:
- El tubo para hincado debe tener dos armazones de refuerzo circular en el cuerpo del tubo, un armazón exterior y otro interior.
- Virola: es un anillo metálico de acero soldable y galvanizado en caliente. La función principal de este elemento es conseguir una estanqueidad total a lo largo de toda la conducción mediante la utilización de juntas elastoméricas no incorporadas. Además permiten absorber los giros y curvas durante la hinca así evitando las fugas.
- Sufridera: anillo de madera que se ubica entre las distintas superficies de empuje de dos tubos consecutivos. Absorben las posibles irregularidades del enchufe para que no aparezcan tensiones en el hormigón durante la hinca.
- Inyectores de Bentonita: son 3 roscas metálicas galvanizadas pegadas a la pared de la tubería, se utilizan para inyectar lodos bentoníticos en la cavidad del terreno y en el tubo, esto tiene la función de lubricar el tubo y evitar desmoronamientos.